Consejos a tener en cuenta a la hora de contratar una reforma
Porque sabemos el esfuerzo y la inversión que supone una reforma, queremos daros algunas pautas que os pueden ser muy útiles para garantizar un buen resultado. Por ello en este post os vamos a dar tres consejos muy sencillos a tener en cuenta a la hora de escoger la empresa que va a reformar vuestro hogar.
Pandemia = El boom de las reformas
Ya es un hecho que en los últimos meses de confinamiento se han disparado las reformas en viviendas. La pandemia está cambiando nuestras costumbres sociales en muchos aspectos, pero también ha supuesto la conversión de la noche a la mañana de nuestro hogar en un espacio vital esencial, que se ha visto obligado a asumir las funciones improvisadas de oficina, gimnasio, cine, parque, restaurante…, poniendo de manifiesto sus carencias y necesidades.
Todo ello ha desembocado en una oleada de reformas, cuya demanda actual ha aumentado en un 60% respecto del año anterior. Esta buena noticia para el sector de la construcción, en un tiempo de crisis económica global, está siendo empañada por el intrusismo de personas sin experiencia.
En este último mes en AR arquitectura legal hemos identificado una creciente demanda de informes periciales para reformas de viviendas con resultados pésimos. Por desgracia la pandemia ha aumentado el riesgo de estafas y el sector de las reformas está siendo uno de los afectados. La facilidad de hoy en día para publicitarse por internet haciendo uso de imágenes ajenas junto con la creciente demanda de reformas, ha hecho de este sector un blanco fácil para muchos amateurs de la construcción que, debido al desempleo, han visto en las reformas una manera fácil de ganarse la vida.
Por este motivo en este post queremos daros algunos consejos que debéis tener en cuenta antes de contratar una reforma:
CONSEJO 1: Busca referencias externas de la empresa a contratar
Aunque el presupuesto sea uno de los factores decisivos a la hora de escoger la empresa de reformas, debemos tener presente la trascendencia que tiene dicha elección. Puesto que de ello va a depender el porvenir y el resultado de las obras. No podemos obviar que aún que nos haga muchísima ilusión la reforma, se trata de un proceso agobiante y cansado para el promotor, ya que conlleva una fuerte inversión económica, de tiempo y la toma de decisiones ciertamente trascendentes. Por todo ello, la elección de la empresa contratista debe ser una decisión concienzudamente meditada y analizada.
Dicho esto, nuestro consejo es que baséis vuestra elección en referencias externas reales. Es decir, en opiniones, tanto positivas como negativas, de conocidos o personas de vuestra confianza que hayan trabajado con la empresa a contratar. Ya que a través de la experiencia de terceros obtendréis información determinante, como pueden ser el cumplimiento de los plazos de entrega, el trato con los operarios, la disposición ante imprevistos, la atención al cliente, la calidad de los acabados, obteniendo una imagen más real de la empresa en cuestión.
CONSEJO 2: Detalla al máximo los trabajos contratados
Como ya hemos avanzado en el apartado anterior, otro factor decisivo es el presupuesto y/o contrato de obras, que aunque sean documentos distintos, a efectos prácticos tienen la misma consideración y función, definir el coste de los trabajos y conformar el marco contractual. Queremos hacer hincapié en la importancia de aquello que se refleja en dichos documentos, puesto que servirán para definir las bases de la contratación. Nuestro consejo es que toméis cierto tiempo en analizar el presupuesto o contrato de obras, con el fin de verificar que queda claramente definido todo aquello que queremos.
Por norma general, solemos fijar nuestra atención en el precio total, los plazos de entrega y la forma de pago. Pero también son importantes los conceptos definidos, las condiciones y el alcance de los trabajos.
Los presupuestos pueden ser de dos tipos:
- Presupuesto a tanto alzado: se establece un precio global por partida o conjunto de partidas.
- Presupuesto con mediciones y precio unitarios: el precio de cada partida se obtiene de multiplicar su medición (m2, m3, unidades, ml…) por un precio unitario (€).
Para reformas de viviendas, no es más aconsejable un tipo que otro, pero en función de la tipología habrá que tener más en cuenta unos aspectos en concreto. En el caso de los presupuestos a tanto alzado es muy importante que la descripción de la partida detalle, en la medida de lo posible, el alcance de los trabajos. Mientras que en el caso de los presupuestos con mediciones y precios unitarios deberemos comprobar que las mediciones se ajustan a la realidad.
En ambos casos, es conveniente que se especifique con el máximo de detalle posible, la calidad, el color, el acabado, el modelo, la marca y el formato de los materiales que se van a suministrar, con el fin de evitar sorpresas o sobrecostes inesperadas.
Tanto en el presupuesto como en los contratos se pueden añadir tantas cláusulas o condiciones como las partes consideren necesario. Por ejemplo se pueden establecer plazos de entrega parciales o penalizaciones por retrasos en la obra, éstas son de vital importancia sobre todo cuando el alcance de la misma no nos permite vivir en el inmueble.
Por último, cuando estemos conformes con el presupuesto, es importante que las dos partes firmen una copia del mismo indicando la fecha de la firma. De esta forma estableceremos un marco contractual que tendrá vigencia durante toda la obra.
CONSEJO 3: Dejar constancia de todo por escrito
Es inevitable que una vez empezadas las obras surjan imprevistos o queramos hacer algún cambio sobre lo presupuestado. Pues bien, nuestro tercer y último consejo, es que quede constancia por escrito de todo aquello que suceda o se acuerde durante el transcurso de las obras, lo más aconsejable es hacerlo por correo electrónico.
Por ejemplo, si se produce un escape de agua, se suministra un material defectuoso o cualquier otro imprevisto, es conveniente dejar constancia tanto de la incidencia como de las gestiones posteriores. De esta forma tendremos un histórico de su evolución en el caso de que el tema se complique o no se solucione.
Por otro lado, en el caso que queramos modificar o añadir alguna cosa que no quede incluida en el presupuesto o contrato de obras, es conveniente que se deje constancia por escrito. La forma más adecuada en estos casos es la adición de anexos al presupuesto o contrato original. De esta forma, aparte de reflejarse el coste de las modificaciones o los extras, estos pasaran a formar parte del mismo marco contractual, a fin de evitar sobrecostes o sorpresas en la factura final.
En caso de problemas: Informe pericial
Aunque cumplamos con todo ello, puede que igualmente haya discrepancias con los trabajos, o no estemos conformes con lo ejecutado, es el momento entonces de asesorarse con un profesional para que perite la obra.
Un peritaje es un informe suscrito por un técnico especializado en la materia, en este caso al tratarse de reformas de viviendas, lo elaborará un arquitecto o arquitecto técnico. El cual tendrá la finalidad de certificar el estado de la obra, determinar el marco contractual, identificar posibles deficiencias, incidencias e incumplimientos contractuales, determinar su causa y valorar económicamente su subsanación.
¿En qué podemos ayudarte?
En AR arquitectura legal estamos especializados en la elaboración de peritajes para que puedas reclamar vía amistosa, mediante mediación o a través de la vía judicial la subsanación de los defectos de la obra.
Además si necesitas asesoramiento jurídico para que defina la estrategia más óptima a seguir ponemos a tu disposición el servicio de abogados especializados en la materia.
Para más información o solicitar presupuesto sin compromiso no dude en contactar con nosotros, llamando o enviando un mail a info@ararquitecturalegal.com explicando su problemática e indicando la dirección del inmueble.